miércoles, 23 de junio de 2010

Un video lento...

La palabra energía es muy utilizada en nuestra sociedad. Seguramente la escuchas y la pronuncias varias veces a la semana, en pláticas con tus amigos, en la escuela y hasta en los medios masivos de comunicación. Sin embargo, no toda la gente concibe el concepto asociado a esta palabra, en la forma que lo hacen los físicos.
La energía es la capacidad que tiene un cuerpo para realizar trabajo. Conviene aclararte que la palabra trabajo a la cual se refiere la definición anterior, no tiene el sentido que le damos cotidianamente, sino el que le dan los físicos. Una característica de la energía es que se manifiesta de diversas formas. Hay energía en la luz del Sol, en los alimentos que consumimos, gran parte de nuestra vida cotidiana depende de la energía eléctrica. La materia por el hecho de existir tiene energía. La otra característica de la energía es que se transforma de una forma a otra, no se puede crear ni destruir. Por ejemplo, se puede transformar la energía eléctrica y la magnética en energía mecánica a través de un motor. Cuando elevamos un objeto a cierta altura, el objeto adquiere energía potencial. Al momento de soltar el objeto, la energía potencial que adquirió se transforma en energía cinética, durante la caída.
Para que tú veas un ejemplo de transformación de la energía te vamos a mostrar los videos de la caída de una pelota de hule en un plato con leche. Si, leíste bien: la caída de una pelota de hule en un plato con leche. Quizás pienses que verlos será aburrido, y que allí no hay nada interesante. Sin embargo los videos están en cámara “superlenta”, y esto los hace mucho más interesantes e inclusive emocionantes. Al observar estos videos podrás ver como la energía cinética de la pelota se transforma en otras formas de energía al momento del choque.





Comentarios acerca de los videos

Para realizar los videos colocamos un plato de plástico con leche en el suelo. El plato se tuvo que ladear para darle mayor profundidad a la leche. La pelota se soltó sobre la leche a una altura aproximada de metro y medio. Se grabaron varios videos, incluyendo aquellos en donde la pelota no cayó sobre la leche. Al revisarlos, nos dimos cuenta de la existencia de fenómenos ondulatorios al momento del impacto ¡Nunca nos imaginamos que los podíamos ver! Ya que nuestro interés era observar el comportamiento de la leche al momento de ser golpeada por la pelota.
Al terminar los videos, decidimos compartir dos de ellos contigo en este espacio, porque hay fenómenos ondulatorios involucrados en ellos, y por lo tanto concuerdan muy bien con el tema principal de este sitio.

viernes, 11 de junio de 2010

Observadores del cielo prehispánico (primera parte)

En 1924 el padre Pascual Saura encontró en el Vaticano un documento muy importante para la historia mexicana. En el están las memorias de algunas discusiones que hubo en 1524, entre los antiguos mexicanos y los primeros doce frailes franciscanos que llegaron a la recién conquistada Tenochtitlan. El manuscrito tiene por titulo: "Colloquios y Doctrina con que los doze Frayles de San Francisco enbiados por el Papa Adriano Sesto y por el Emperador Carlos Quinto convertieron a los Indios de la Nueva Espanya, en Lengua Mexicana y Española". Seguramente ya te diste cuenta que el titulo está redactado en la lengua española de esa época. Este manuscrito permaneció guardado durante cuarenta años, y fue encontrado en Tlatelolco por fray Bernardino de Sahagún en 1564, quien escribió lo siguiente refiriéndose al documento:

“…ha estado en papeles y memorias hasta el año de mil quinientos y sesenta y cuatro, porque antes no vuo oportunidad de ponerse en orden ni convertirse en lengua mexicana bien congrua y limada: la qual se bolvió y limó en este Colegio de Santa Cruz del Tlatilulco este sobredicho año con los colegiales más hábiles y entendidos en la lengua latina que hasta agora se an en el dicho colegio criado; de los quales uno se llama Antonio Valeriano, vezino de Azcapucalco, otro Alonso Vegerano, vezino de Quauhtitlan, otro Martín Iacobita, vezino deste Tlatilulco y Andrés Leonardo, también de Tlatilulco. Limose asimismo con quatro viejos muy prácticos entendidos ansí en su lengua como en todas sus antigüedades.
Va este tractado distincto en dos libros: el primero tiene treinta capítulos que contienen todas las pláticas, confabulaciones y sermones que vuo entre los doze religiosos y los principales y señores y sátrapas”

Sin embargo el libro de los Colloquios de los doce (así se conoce actualmente a este documento) está incompleto, ya que solo se han encontrado catorce capítulos de los treinta mencionados por fray Bernardino de Sahagún, y lo que se ha encontrado del libro original, se encuentra en la biblioteca del Vaticano.
En el libro de los Colloquios quedo registrada la manera en que los indígenas defendieron su manera de ver el mundo ante los frailes. Los siguientes párrafos que te vamos a enseñar provienen de este documento, y contienen la respuesta que dieron los principales señores mexicas a los frailes franciscanos, cuando estos últimos hicieron cuestionamientos y condenas de las antiguas creencias de los mexicas:

“Y, he aquí, señores nuestros, están los que aún son nuestros guías, ellos nos llevan a cuestas, nos gobiernan, en relación al servicio de los que son nuestros dioses, de los cuales es el merecimiento de la cola, el ala ( la gente del pueblo): los sacerdotes ofrendadores, los que ofrendan el fuego, y también los que se llaman quequetzalcoah.
Sabios de la palabra, su oficio, con el que se afanan durante la noche y el día, la ofrenda de copal, el ofrecimiento del fuego, espinas, ramas de abeto, la acción de sangrarse. Los que miran, los que se afanan con el curso y el proceder ordenado del cielo, como se divide la noche. Los que están mirando (leyendo), los que cuentan (o refieren lo que leen), los que vuelven ruidosamente (las hojas de) los libros, de la tinta negra, la tinta roja, los que tienen a su cargo las pinturas. Ellos nos llevan, nos guían, dicen el camino. Los que ordenan cómo cae el año. Cómo siguen su camino la cuenta de los destinos y los días, y cada una de las veintenas. De esto se ocupan, de ellos es el encargo, la encomienda, su carga: la palabra divina…”

El contenido del texto anterior es muy interesante, porque allí se menciona que hubo gente dedicada al quehacer astronómico dentro de la sociedad mexica. Sin embargo este documento no es el único que señala la existencia de astrónomos entre los antiguos mexicanos. En el códice mendocino hay imágenes que proporcionan pistas sobre la función social de los astrónomos. Abajo hemos dibujado algunas imágenes que aparecen en el códice, con el objetivo de que tú hagas una interpretación sobre la función social que desempeñaron los astrónomos mexicas.
















Antes de continuar conviene que te aclaremos lo siguiente: en las tres imágenes anteriores aparece una nube con círculos que dan la sensación de ser ojos. Esa nube representa al cielo durante la noche. En la segunda imagen aparece una de esas personas “que se afanan con el curso y el proceder ordenado del cielo” cantando y su canto lo acompaña con un teponaztli.
Las personas dedicadas al quehacer astronómico fueron los tlamatinime. Según el historiador Miguel León Portilla, la palabra tlamatini significa “aquel que sabe algo.” Es importante señalar que los tlamatinimes fueron antiguos sabios nahuas, que hicieron filosofía, tuvieron conocimientos de medicina, también se dedicaron a la astronomía, entre otras actividades, y cuyo proceder fue muy similar al de un científico actual. Es importante puntualizar que los tlamatinime no fueron brujos o chamanes. La sociedad mexica supo reconocer el buen trabajo de los tlamatinime, y no confundió su trabajo con el de los “falsos sabios o brujos”
En la actualidad hay gente se dedica a investigar la astronomía que hicieron los tlamatinime mexicas, se han obtenido algunos resultados de esas investigaciones pero aun falta mucho por conocer. De entrada, todavía no entendemos cabalmente la finalidad de hacer astronomía por parte de los antiguos sabios mexicanos. Tampoco conocemos de manera integral los instrumentos que utilizaron esos astrónomos para escudriñar el cielo. Sin embargo lo que se ha podido investigar resulta muy interesante. En “Observadores del cielo prehispánico (segunda parte)” te diremos algunos resultados de esas investigaciones, como el impacto que tuvo el conocimiento astronómico en las sociedades precolombinas de Mesoamérica. Por lo mientras te damos las instrucciones para que construyas un teponaztli como el que aparece en la segunda imagen.

Construye un teponaztli

El teponaztli es un ideófono de origen precolombino, esta construido de un tronco ahuecado. En alguna parte del costado del tronco hay una ranura en forma de “H” que forma dos lengüetas las cuales, al ser golpeadas producen sonidos. Este ideófono se empleo para llamar al pueblo a la guerra y acompañar danzas. Ha sobrevivido al paso del tiempo y en la actualidad es utilizado por personas que practican las danzas mexicas, también se vende como artesanía, y además es empleado por diversos grupos musicales profesionales y aficionados.
La construcción de un teponaztli es bastante sencilla, lo único que se requiere es conseguir un bambú de unos 45 cm. de largo y unos 11 cm. de diámetro. Quizás la parte más difícil de la elaboración, sea hacer la ranura en forma de “H” en el bambú. La siguiente figura te indica las medidas para las ranuras.







Ya dejamos a tu ingenio la manera de hacerle las lengüetas al bambú. Una vez que termines tu teponaztli, lo puedes hacer sonar golpeándolo con unas baquetas que tengan goma en uno de sus extremos.

jueves, 15 de abril de 2010

Un poema náhuatl antes de hablar de la frecuencia natural

En la literatura que se ha podido rescatar de los pueblos prehispánicos de Mesoamérica, hay muchos poemas, que aparte de ser muy bellos pueden proporcionar información acerca del pensamiento y de la forma de vida de estos pueblos. Por ejemplo en el libro Historia de la Literatura Náhuatl de Ángel Maria Garibay K. está el siguiente poema de origen precolombino:

O anqui ye oncan Tlaxcalla Ayahue
chalchiuh tetzitlaca cuicatoque
in huehuetitlan Ayahue
xochin poyon poyon ayahue
Xicotencatl teuctli in Tizatlacatzin
in Camaxochitzin cuicatica in mellelquiza.

La traducción de este poema es:

Allá en Tlaxcala
con rodelas de cobre incrustadas de jades, cantaron y tocaron
junto a los tambores:
delicia, delicia de flores:
Xicotencatl, príncipe señor de Tizatlan
Camaxochitzin con canto y música se deleitan.

Ya te habrás dado cuenta que en el poema anterior se menciona el uso de tambores, y de “rodelas de cobre” para hacer música. Las rodelas de cobre fueron escudos redondos, que se les conoció con el nombre de tetzitlaca. En las danzas se les golpeaba para hacerlos sonar, es decir se les utilizó como ideófonos. Los ideófonos son instrumentos musicales, que producen sonido al ser golpeados, ya que prácticamente toda su materia es puesta en vibración. Entre los ideófonos empleados en la actualidad para hacer música, están los platillos de una batería y las claves. Sin embargo hay muchos objetos que pueden servir como ideófonos como las taparoscas de refresco, las corcholatas, las piedras o un cajón de madera. En los fandangos del estado de Veracruz se acostumbra bailar sobre el cajón, en donde el ritmo del zapateo coincide con el ritmo de la música. El zapateo sobre el cajón es considerado por los jaraneros como parte de la música que ellos interpretan.

Un poco de la física que hay detrás de los ideófonos.

Si quieres saber un poco de la física involucrada en los ideófonos, es necesario que conozcas lo que es una vibración forzada. En una guitarra bien afinada se puede entender este concepto, conviene aclarar que la guitarra no es un ideófono. Si pulsas la sexta cuerda de ella, que es la más gruesa, lograrás que la cuerda vibre con una frecuencia de 82.41 hertz aproximadamente, es decir la cuerda oscilará ¡82.41 veces en un segundo! La energía de esta vibración se transmitirá a la caja de la guitarra, y la obligará a vibrar con la misma frecuencia. La caja de la guitarra forzará al aire que está a su alrededor a vibrar, produciendo el sonido que escuchamos. Si pulsas otra cuerda de la guitarra, digamos la quinta que esta debajo de la cuerda más gruesa, se provocará un fenómeno similar, sólo que en esta ocasión, la frecuencia a la cual se ven obligados a vibrar la caja y el aire que la rodea es de 110 hertz, que es la frecuencia de oscilación de quinta cuerda. ¿Ya notaste que la caja de la guitarra y el aire que la circunda son forzados a vibrar a la frecuencia de vibración de las cuerdas? Pues bien se tiene una vibración forzada cuando se le obliga a un objeto a vibrar a una determinada frecuencia, como sucede con la caja de la guitarra y el aire que está a su alrededor.
Los charanguistas, los jaraneros o cualquier intérprete de un instrumento de “cuerda golpeada” como la guitarra, o “cuerda frotada” como el violín, saben por experiencia que cuando dejan de utilizar su instrumento por un largo periodo de tiempo, este pierde calidad en el sonido que emite. Por lo que siempre procuran utilizarlo para que el sonido del instrumento sea el óptimo. En este caso las vibraciones forzadas ayudan a mantener una buena calidad de sonido en los instrumentos de cuerda.
Hay una gran variedad de ideófonos, y todos ellos emiten un sonido propio cuando los golpeamos, esto se debe a que cada uno de ellos tiene su propia frecuencia natural. Dos palos de escoba del mismo tamaño, ayudan a entender mejor este concepto. Si golpeamos suavemente los palos entre si, escucharemos cierto sonido. Con el golpe se les transmite energía a los palos, la mínima necesaria como para forzar a que estos vibren con ciertas frecuencias, que son las que escuchamos. Cuando esto ocurre decimos que los palos vibran con su frecuencia natural. La frecuencia natural de un objeto depende de de su forma y de su elasticidad. Si volvemos a golpear los palos con mucha mayor fuerza escucharemos un sonido que es más agudo que el anterior ¿Por qué crees que esto ocurra?

Transforma una escoba vieja en unas claves

En esta ocasión te sugerimos para construir unas claves, y para ello solo necesitas un palo de una escoba que ya no sirva, fíjate que el palo sea realmente de madera, porque actualmente ya se hacen de otros materiales. También se necesita un serrucho o segueta para cortarlo, una regla de unos 30 centímetros, y una lija para quitar las astillas.
Del palo de escoba corta dos tramos de 21 centímetros, como se observa en la siguiente figura.



Ahora líjalos para quitarles las astillas y las claves estarán listas para usarse. Golpéalos entre si para que escuches el sonido que emiten, no aprietes las claves al momento de golpearlos, agárralas suavemente y así obtendrás el mejor sonido que ellas puedan emitir. La calidad de sonido producido por estas claves, es comparable a las construidas para grupos profesionales.
Si quieres que suenen más agudas puedes recortarlas hacerlas más cortos, o si quieres que suenen más graves córtalos con una longitud mayor a los 21 centímetros que te sugerimos. Investiga que ocurre si utilizas palos de escoba de diferentes grosores.

Elaboración de un “palo de lluvia”sencillo.

El palo de lluvia es un instrumento muy conocido en México, simula el sonido de la lluvia, y por eso tiene ese nombre, también imita el sonido del agua que corre en un arroyito. Es un instrumento que es utilizado por los grupos musicales de diversos géneros y niveles. Se emplea en obras de teatro, en ceremonias de todo tipo, inclusive en muchas casas se tiene uno, ya que su sonido resulta agradable al oído. El palo de lluvia es una caña de bambú con palitos que la atraviesan diametralmente, y en su interior hay semillas que se pueden moverse a lo largo de la caña. Cuando las semillas están en movimiento chocan con los palitos, y generan el sonido característico de este instrumento.
Si quieres construir un palo de lluvia muy sencillo, vas a necesitar muchos alfileres con cabeza, cinta adhesiva, un pedazo de cartoncillo, y un puñito de cualquier semilla como arroz, la lenteja o el maíz palomero. También se va a ocupar un tubo de cartón rígido, con paredes gruesas. El diámetro interno del tubo deberá tener unos 5 centímetros aproximadamente. El largo del tubo puede ser de 40 centímetros, aunque también se puede emplear un tubo que tenga hasta un metro de largo.
El primer paso consiste en atravesar el tubo de cartón con los alfileres como se indica en la figura a, hay que tener cuidado con el uso de los alfileres. Los alfileres deberán ir formando una espiral a lo largo del tubo como se indica en la figura b, entre más largo sea el tubo que emplees, la espiral deberá ser más larga y deberá dar mas vueltas a lo largo del tubo, procura que entre los alfileres haya suficiente espacio, para que puedan pasar las semillas.



Una vez que hayas terminado de atravesar el tubo de cartón con los alfileres, tapa un extremo del tubo. Para ello es necesario que elabores una tapa con el cartoncillo y la pegues con la cinta adhesiva. Posteriormente vacía un puñito de arroz en el interior del tubo y tapa el extremo que falta, también con el cartoncillo y la cinta adhesiva. El palo de lluvia terminado se vera como muestra la figura c. Colócalo en posición vertical y escucha el sonido que emite. Recuerda que este es un palo de lluvia sencillo, su sonido no reproduce totalmente el sonido de la lluvia. Sin embargo permite aprender mucho acerca de la construcción de este instrumento.
Si decides hacer un palo de lluvia construido con bambú, es necesario que tomes en cuenta que el procedimiento de construcción es similar al que acabamos de describir. En este caso la elaboración de este instrumento en bambú es un trabajo más rudo. Te recomendamos utilizar un trozo de bambú seco, para que ya no cambie su sonido. También es necesario raspar con una varilla metálica el interior de la caña, para destapar totalmente el bambú, a veces es necesario golpear la varilla con un martillo, ya que la caña está tapada en los nodos. El raspado interno también sirve para aumentar el diámetro interior y facilitar la circulación de las semillas o piedritas que se vayan a colocar en el interior. Es importante que dispongas de un taladro para hacer los agujeros de los palitos que atraviesan la caña diametralmente. Cuando insertes los palitos dentro de los agujeros de la caña, ponles un poco de pegamento para fijarlos, y por último las tapas de los extremos las puedes hacer con un trozo de cuero, que puede ir fijo a la caña con algunas tachuelas.

miércoles, 24 de febrero de 2010

Hoy te platicaremos de las zampoñas (Última actualización: 09 / 01 / 2012)

“Ellos traen también sus arpas de una cuerda sus zampoñas y sus tambores. Los pastores cantaron y tocaron alegrísimas sonatas en sus guitarras, zampoñas y panderos…”
Las palabras anteriores corresponden a la narración de “La navidad en las montañas”, escrita en la segunda mitad del siglo XIX por Ignacio Manuel Altamirano, este escritor mexicano vivió en la época de Benito Juárez.
Ya habrás notado en la frase inicial la referencia que se hace a las zampoñas o sikus, como también se les conoce. La zampoña es una flauta de pan construida con tubos de distintos tamaños que van unidos del más grande al más chico, cada tubo está tapado en un extremo y destapado por el otro. Generalmente se emplea caña hueca para elaborar estas flautas, sin embargo también hay sikus elaborados con tubos de metal, de vidrio, plumas de cóndor, hueso, etc.

La antigüedad de la narración de Ignacio Manuel Altamirano, nos sugiere que en algunos lugares de México se llegaron a emplear los sikus en la música popular del siglo XIX. Sin embargo el empleo de la zampoña en el país es mucho más antiguo porque se han encontrado estas flautas de origen prehispánico en Tres zapotes y en Esparza, ambas localidades del estado de Veracruz. La flauta que enseguida te mostramos también es precolombina, se encuentra en exhibición permanente en el Museo Nacional de Antropología e Historia de la Ciudad de México.

Son pocas las flautas de este tipo que se han encontrado en el país. Pero conviene recordar que aún faltan muchos sitios arqueológicos por explorar. Sin embargo México no es el único lugar en donde se les ha encontrado, también se han encontrado en Sudamérica. Algo muy interesante es que su afinación no corresponde a los patrones de afinación que se emplean actualmente. Históricamente los sikus se han desarrollado más en Sudamérica que en México, además su afinación ha evolucionado. Actualmente este instrumento es empleado por músicos profesionales y no profesionales, en géneros musicales que van desde los más regionales hasta el rock y el jazz.

¿Qué tiene que ver la física con todo esto?

Cuando se sopla en el extremo destapado de un tubo de la zampoña una compresión, que es aire comprimido, baja por todo el tubo, rebota en el fondo del tubo y sube hasta llegar nuevamente al extremo abierto, en un tiempo menor a una milésima de segundo. Al unirse los efectos, del aire comprimido, que suben y bajan, éstos se amplifican constantemente provocando el fenómeno de resonancia, es decir, genera el sonido que escuchamos. Si pudiéramos tomar una fotografía del aire, veríamos que parece estar estacionado con zonas enrarecidas (baja presión y baja densidad) y otras comprimidas (alta presión y alta densidad)

El tono que se escucha depende de la frecuencia de la onda, y la frecuencia a su vez depende del tiempo de ida y vuelta de la compresión a lo largo del tubo, por lo tanto en tubos largos lo que entra en resonancia es una onda larga y se escucha un sonido grave, en un tubo corto entra en resonancia una onda corta y se escucha un sonido agudo.

¡Construye tus propios sikus¡

La fabricación de este instrumento tiene la ventaja de poderse construir con materiales y herramientas fáciles de conseguir. El costo de construcción de los sikus es realmente barato. No se requiere de la tecnología que implicaría construir un saxofón, por ejemplo. La experiencia que puedes adquirir en la fabricación de estos instrumentos te puede servir en otros proyectos.
Primero consigue el tubo para construir tu zampoña. Si vives en México lo puedes conseguir en locales que vendan material eléctrico o tlapalerías. Pídelo como: “un tramo de tubo PVC conduit eléctrico, que sea de media y ligero”. El precio de cada tramo oscila entre 10 y 20 pesos, depende del local en donde lo compres. Un solo tramo es suficiente, porque mide 3 metros de largo. En la siguiente fotografía podrás ver el tubo es de color verde y su diámetro interno es de 1.5 cm.

También vas a necesitar una segueta o cualquier herramienta para cortar el tubo. Consíguete 13 bolitas de unisel con 2 cm de diámetro, una maderita de 13 cm de largo y otra de 14 cm. Ambas maderitas deben de tener 2 cm de ancho aprox. Hay que tener a la mano hilo resistente, cualquier pegamento, una pluma o plumón, pedazos de lija de diferentes números. Por último una regla graduada y cualquier varilla que entre en el tubo con una longitud mínima de 30 cm.

Ahora sí, Manos a la obra: El primer paso es obtener 13 tubos del tramo de 3 metros. Córtalos con las medidas indicadas en la fotografía.

Ya que cortaste los 13 tubos, lija las orillas de cada uno de ellos. El objetivo es quitar el filo resultante en los extremos al cortarlo. Se debe lijar de tal manera que las orillas del tubo no te lastimen al entrar en contacto con tus labios. Emplea las diferentes lijas. El siguiente paso consiste en meter las bolitas de unisel a presión dentro de los tubos, para ello la bolita se deberá meter por un extremo…

Ahora ordena todos los tubos tapados, del más grande al más pequeño, como se ilustra en la fotografía. Observa que los tubos tienen un número. El tubo más grande tiene asignado el número 1 y debe quedar a tu izquierda, mientras que el más pequeño tiene asignado el número 13 y debe de quedar a tu derecha.

Separa los tubos que tienen los números: 1, 3, 5, 7,9, 11 y 13, es decir los impares. Procura que estos tubos no se revuelvan con los pares: 2, 4, 6, 8, 10 y 12.

Junta los tubos impares (1, 3, 5, 7, 9, 11, 13) del más grande al más pequeño, como se muestra en la fotografía de arriba. Haz lo mismo pero con los tubos pares (2, 4, 6, 8, 10, 12). El conjunto de tubos impares te formara al “macho”, mientras que los pares te formaran a la “hembra”

Te sugerimos que coloques las maderas en los tubos y los amarres como se indica en la siguiente imagen. Utiliza la maderita de 14 centímetros para el macho y la de 13 para la hembra. Revisa que las maderitas no queden entre el macho (derecha) y la hembra (izquierda). Estas deben de estar en las orillas para facilitar su manejo al momento de ejecutarlas.

Los siguientes pasos van a servir para afinar tus zampoñas. Marca todas las profundidades que se indican en la fotografía en la varilla. Esta varilla va a servir para colocar las bolitas de unisel con la profundidad adecuada dentro de los tubos.

En la imagen de abajo se ve el procedimiento para afinar el tubo número 1. Lo mismo se hace con el resto de los tubos.

En la siguiente imagen se observa el último paso y consiste en fijar, con cualquier pegamento, las bolitas al tubo para que no se muevan.

...y con ello habrás terminado tu zampoña.

Recuerda que puedes emplear diferentes materiales para la construcción de las zampoñas, solo depende de tu curiosidad y creatividad, de esta manera puedes investigar los materiales que te permiten hacer sikus de mejor calidad.
Los tubos de los sikus que acabas de construir producen las siguientes notas:


Ahora a tocar, ensayar y marearse

Cuando comiences a soplar en los tubos de la zampoña, seguramente te vas a marear, no te preocupes con el tiempo y practicando dejaras de sentir ese malestar. También procura tener un poco de agua para que te refresques la boca cuando ensayes, ya que se reseca al soplar los sikus.
En la imagen de abajo hemos colocado la partitura de una pieza del folklore boliviano, se llama “Palomita hirpastay”. Esta melodía es sencilla e ideal para ser interpretada por quienes empiezan a tocar los sikus y/o la quena. En la partitura también están los acordes para acompañarla con una guitarra o con un charango. Debajo de la partitura hemos colocado una liga que te llva al sitio del grupo Tinku amankay, que es el grupo en el cual tocamos, nosotros que somos los autores de este blog, y allí podrás escuchar esta pieza que nosotros interpretamos con los sikus de PVC y un charango, esta es una grabación casera y esperamos que te guste la melodía.


Ir al sitio de Tinku amankay

¡Hola, pásale por favor!

Bienvenido, nosotros somos Mitzi Castrejón y Ezequiel Guevara, nacimos en la Ciudad de México y estudiamos física a nivel profesional. Este espacio lo hicimos por el gusto de compartir contigo nuestro conocimiento de la física. Nuestra intención es mostrarte la física que circunda en nuestras actividades cotidianas, las que están alejadas de la vida académica. A nosotros nos gusta la música mexicana y la latinoamericana, por lo que te hablaremos mucho acerca de este tema y de la física que la rodea. Te enseñaremos a construir algunos instrumentos musicales sencillos. Te vamos a dar la información necesaria para que construyas algunos “juguetes” que te permitan entender el funcionamiento de instrumentos y equipos que están alrededor del quehacer musical, como micrófonos o bocinas por ejemplo.
En ocasiones te contaremos alguna historia, o te mostraremos lo que otros físicos hacen fuera de la vida académica, no te vamos a poner su biografía, eso es muy aburrido. Este tipo de información ayudara a contextualizar el conocimiento científico que te estamos compartiendo. Lo que hasta ahora te hemos platicado también tiene la intención de mostrarte que la física forma parte de nuestras actividades cotidianas y que no esta tan alejada de nuestra cultura.